Saber si una foto entraña algún tipo de retoque previo es una tarea complicada especialmente si la edición afecta únicamente a pequeños detalles. JPEGsnoop detecta cualquier cambio por muy sutil que sea.
El procedimiento se resume simplemente en escoger la imagen a tratar, admitiendo cualquier fotografía e incluso capturas de un vídeo siempre que su formato sea RAW o JPEG. Para el análisis JPEGsnoop se basa en los conocidos como metadatos EXIF, además de otros elementos internos de este tipo de ficheros.
Parte de la información que muestra se refiere a si la imagen ha sido retocada, indicando en caso afirmativo el editor de imágenes que se ha utilizado para tal fin.
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